Una destilación que todos quieren y pocos disfrutarán

Las dos comunidades que más beligerantes se vienen mostrando con respecto a las existencias de sus bodegas, han dado un paso al frente y, siguiendo las indicaciones del Ministerio; han puesto en marcha el mecanismo para poder realizar una destilación de crisis.

La Junta de Extremadura solicitaba, la semana pasada, al Ministerio de Agricultura para que éste diera curso a la Comisión Europea, organismo competente en el asunto, la apertura de una destilación de 4’3 millones de litros tinto no amparado por ninguna indicación de calidad. Para ello anunciaba la dotación de 1’3 millones de euros provenientes de sus fondos PASVE ejercicio 2022-23.

El Gobierno vasco, por su parte, activaba una destilación con una dotación de 7’86 millones de euros de fondos propios de los Presupuestos Generales del País Vasco para aquellas bodegas que, perteneciendo a la D.O.Ca. Rioja, lo solicitasen desde la publicación en el Boletín Oficial del País Vasco y hasta el agotamiento de los fondos. Estimándose el volumen global de vino que pudiera verse afectado en el entorno de los ocho millones de litros. Fijando los precios de la ayuda en función del volumen de producción declarada en 2022. Así, las que menos cobrarán serán aquellas con un volumen de producción superior al medio millón de litros, y lo harán a razón de 0’9 €/litro, las que estén entre los 250.000 litros y el medio millón, el precio será de un euro y las de menos de ese cuarto de millón, a 1’1 euro el litro. Limitando el importante máximo a ofertar en el diez, quince y veinte por ciento respectivamente.

La Rioja, región donde mayor parece ser el problema, atendiendo al volumen que se maneja, 60 millones de litros, divididos en dos campañas 2023 y 2024; de momento, lo único que ha habilitado ha sido un registro en el que las bodegas debieron comunicar antes del 9 de mayo, su excedente. Para, a partir del día 10, comprometerse el Gobierno regional en concretar las medidas y dotación presupuestaria a aplicar. Lentitud aprovechada por algunas formaciones políticas que, ante la proximidad de las elecciones, se han apresurado en especificar y anunciar su aplicación inmediata, para el caso de resultar ganadoras.

Del resto de comunidades autónomas, nada o negativa es la posición que mantienen con respecto a la aplicación de esta medida. Fiando el equilibrio futuro del mercado a una lluvia que está siendo muy escasa, con previsiblemente fuertes consecuencias sobre la próxima cosecha y la recuperación del mercado exterior que está viéndose fuertemente afectado por altas tasas de inflación, que deberán moderarse en los próximos meses; y consecuencias de una guerra que todos confían en su finalización más pronto que tarde.

 

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