Con la aprobación por el Consejo de Ministros el pasado viernes 19 de julio del Real Decreto 548/2013, sobre la aplicación de las medidas del Programa de Apoyo Nacional (PAN) al sector vitivinícola para el periodo 2014-18, se concretan aquellas actuaciones que serán objeto de ayuda y los importes para cada uno de los años, cuyo detalle podrán encontrar en las páginas interiores.
La inclusión de las inversiones destinadas a mejorar las condiciones de producción y comercialización de los vinos ha sido recibida por el sector con gran alegría. La reestructuración y reconversión del viñedo, la eliminación de los subproductos contribuyendo a fomentar la protección medioambiental, junto con promoción en mercados de terceros países, complementan aquellas medidas que podrán ser objeto de apoyo.
Mención aparte merece el Pago Único, contemplado para el año 2014, pero cuyo futuro para los siguientes años fue decidido por la Conferencia Sectorial de Agricultura del pasado 24 y 25, y en la que se decidió que los 142,75 M€ que afectan a cerca de setecientas mil hectáreas, “saldrán” del sector para ir a engrosar el nuevo régimen de Pago Básico (RPB) a partir de 2015. En esta misma Conferencia también se decidió que no podrán incorporarse nuevas hectáreas, ni de frutas y hortalizas, pero tampoco de viñedo al RPB con el fin de no verse reducidas las ayudas que estaban recibiendo.
De esta manera se impide que aquellas medidas orientadas a mejorar la competitividad de nuestros vinos, puedan verse beneficiadas con mayores fondos.
Pero cuidado,que no acaban aquí los problemas; porque de otra de las cuestiones ante las que habrá que estar muy vigilante es la posibilidad de que las ayudas a la promoción permitan potenciar el consumo y el desarrollo de la marca, como ocurre actualmente con aquellos programas destinados a terceros países; o deban limitarse a informar y formar al consumidor sobre la necesidad de tener un consumo moderado e inteligente; tal y como ya era posible con la medida contemplada en los reglamentos horizontales y que, concretamente, es la que ha hecho posible la puesta en marcha de la campaña “Saber beber, saber vivir” en diferentes países de la Unión Europea, entre ellos, España.
Respecto a la cosecha 2013-14, de momento, se afronta con una debilidad notable en las cotizaciones de los vinos y unas estimaciones que nos llevarían a situarnos en el entono de los años 2003 y 2004, con cosechas que rozaron los cincuenta millones de hectolitros. Pero eso no son más que estimaciones, con más o menos fiabilidad, que todavía están por concretarse.